Otra actuación memorable del prodigio serbio tras batir su récord anotador de carrera y en noche de back-to-back.
Si no es el mejor jugador del mundo, poco le tiene que faltar. Porque en su palmarés relucen tres MVP de la NBA, el de las finales, anillo de campeón o medalla olímpica. Porque ha convertido en su magia en algo habitual, cosa que es más difícil si cabe. Nikola Jokic tiene un don: jugar al baloncesto. Y lo hace como nadie. El serbio vive reventando la NBA con actuaciones propias del blanco y negro. De esas que duran tres minutos, se cortan y su rastro está perdido. En Atlanta mostró, más todavía, que su rutina es ser un jugador absolutamente excepcional.
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Jokic jugó un partido increíble ante los Wizards. Hizo 56 puntos, 16 rebotes y 8 asistencias en un buen 22/38 en el tiro de campo. La única mancha fue que Denver perdió ante el peor equipo de la NBA y uno que llevaba más de un mes de competición sin ganar. Viajó a Atlanta en back-to-back, días consecutivos, y lejos de frenar, volvió a ser el Joker. Porque llegó a los 48 puntos, 14 rebotes y 8 asistencias. Con menos lanzamientos (17/29 TC y 3/6 T3), rozando encadenar dos noche de 50 puntos en 24 horas. Una barbaridad legendaria.
Denver, de paso, ganó. En una paliza sin mayor problema (111-141) en una cancha de equipo revelación. Y ese equipo que es uno de los peores de la NBA en todos los índices, especialmente ofensivo, cambia a ser uno top cuando el ala-pívot de Sombor domina los partidos. Hace mejores a todos, en esta ocasión destacando lo de Porter Jr. (26 puntos) y Braun (17).
“Es la respuesta que necesitaba ver. No me sorprende, son un grupo de chicos que han ganado muchos partidos juntos”:
Mike Malone
“Es la respuesta que necesitaba ver. No me sorprende, son un grupo de chicos que han ganado muchos partidos juntos”, explicó Mike Malone, técnico de los Nuggets. Protagonista también porque sentó a Jokic cuando podía enlazar dos partidos en back-to-back de 50 puntos. Se quedará en el limbo esa posibilidad.
Aunque quedarán unas barbaridades estadísticas increíbles. Solo hace falta repasar los tres últimos partidos. Uno de 20+20 y triple-doble con 50% en el tiro, el máximo de carrera y un 56+16+8 con tres triples y 58% en lanzamientos y el de 48+14+8 sumando tres triples y tres robos de balón en un 59% de acierto.
Hender “Vivo” González
Con información de Marca
