Superó en semifinales a Sorana Cirstea.
La veterana checa Petra Kvitova se clasificó para la final del WTA 1.000 de Miami, al imponerse por 7-5 y 6-3 a la rumana Sorana Cirstea, y se jugará el título contra la kazaja Elena Rybakina. Será un duelo entre campeonas de Wimbledon. Pasada Petra, vigente Elena.
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Kvitova, 12 del ránking WTA, remontó un 2-5 y 0-30 en el primer set para abrirse el camino hacia la primera final de su carrera en el torneo de Miami. Luchará por el trigésimo título de su extraordinaria carrera. La doble campeona de Wimbledon, de 33 años, es la segunda jugadora en actividad que más títulos luce en su palmarés, solo detrás de la estadounidense Venus Williams (49).
Sorana Cirstea, número 74 del mundo, volvía a disputar unas semifinales en un WTA 1.000 después de 10 años. Antes había eliminado a la bielorrusa Aryna Sabalenka, número dos WTA. Había ganado cuatro de los cinco precedentes contra Kvitova en superficie rápida.
El duelo comenzó con apuros para Kvitova y con un ambiente complicado en las gradas. Un aficionado de Cirstea celebraba de forma constante y ruidosa cada error de Kvitova, incluso cuando fallaba sus primeros saques. La jueza debió pedirle silencio.
Tras el complicado inicio, Petra logró cuatro juegos consecutivos para llevarse el primer parcial por 7-5, tras anular dos bolas de set a favor de Cirstea con 5-4. En el segundo parcial sacó con contundencia, mandó en los puntos y acabó su partido con hasta 28 golpes ganadores. Hizo valer una rotura en el segundo juego para abrirse el camino hacia el 6-4.
De ganar el torneo, Kvitova volverá al ‘top 10’. No será fácil: Rybakina derrotó en semfinales a Jessica Pegula, número tres del mundo, y hace dos semanas venció en Indian Wells.
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Hender “Vivo” González