A los Padres de San Diego los agarraron fuera de base en el arranque de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. Un par de cuadrangular de los estelares Bryce Harper y Kyle Schwarber pusieron fin a la inspiración que traía la tropa de Bob Melvin.
Los religiosos vienen de eliminar a los Mets de Nueva York y a los Dodgers de Los Ángeles, dos de los cuatro equipos que obtuvieron 100 triunfos en 2022, nada menos. Esta vez no pudieron aprovechar la ventaja de empezar en casa para arrancar el duelo que otorga el ticket a la Serie Mundial.
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«Nunca había visto un batazo de esa magnitud, como el de Schwarber, ni siquiera en prácticas de bateo».
El jardinero Bryce Harper puso fin al dominio que traía el japonés Yu Darvish, quien había sacado de circulación a 10 de sus primeros 12 oponentes. El guardabosques despachó un jonrón a 386 pies para abrir la pizarra.
Eso no amilanó al nipón que llegó a sacar casi en fila a sus siguientes 11 adversarios, salvo por una excepción. El zurdo Kyle Schwarber sacó un dantesco bambinazo de 488 pies que dejó atónitos a todo y puso cifras definitivas al compromiso, el cual concluyó 2 a 0.
El Petco Park fue escenario de un tremendo duelo de pitcheo. El estelar Yu Darvish se fue con la peor parte, pero brilló al solo resbalar con esos dos cuadrangulares. En lo demás, permitió solo tres hits en siete entradas, con siete fusilados.
Pero su contraparte Zack Wheeler estuvo aún más intratable y los artilleros de los californianos no pudieron ante él. El zurdo tiró siete episodios en blanco, con solo un hit permitido, un boleto y ocho guillotinados.
«El trabajo de Zack Wheeler fue espectacular, todos los lanzadores hicieron bien su trabajo. Pero Zack nos dio siete innings de calidad. No hay mucho más que decir».
La única posibilidad que tuvieron los Padres fue en el noveno capítulo cuando amenazaron al venezolano José Alvarado. El embajador vinotinto le dio boleto a Jurickson Profar y Juan Soto se embasó por error del campocorto. Le tocaba enfrentar a Manny Machado y a Josh Bell, nada menos y los dominó a los dos.
Hender “Vivo” González
